Con el bullicio e inquietud imperante en nuestra sociedad actual muchas veces se nos olvida la importancia del silencio.
De hecho, algo tan sencillo como adoptar ciertos hábitos “silenciosos” puede suponer un cambio de impacto en nuestras vidas. Y es que, el silencio, tiene un tipo de energía que difícilmente encontraremos de cualquier otro modo.
Es el silencio el que ayuda a reflexionar para pensar y actuar después, el que ayuda a entrar en un estado de calma cuando nuestra mente se encuentra agitada e inquieta. De esta manera, el silencio se puede convertir en nuestro mejor terapeuta si le damos la oportunidad.
Precisamente ya lo decía Pascal al afirmar que “toda la desdicha humana se debe a una sola cosa, que es no saber permanecer en reposo en una habitación”. Y es que, muy a menudo muchas personas sienten una imperiosa necesidad de llenar ese vacío, ya sea hablando por hablar, con la televisión o la música, cualquier ruido es mejor que el vacío.
Así, que para ciertas personas esta oportunidad de crecer se convierte en un estorbo, una sensación incómoda de soledad de la que tienen que huir. De ahí que tantas veces dejemos el televisor encendido sencillamente para romper ese abrumador y desagradable silencio.
Ahora bien, si sabemos apreciar el silencio con todas las oportunidades que nos brinda para conocernos, empezaremos a entender el silencio como una fuente llena de posibilidades.
Cómo utilizar el Silencio para ser mejores Conversadores
Por un lado, a la hora de conversar o mantener una discusión, saber cómo manejar el silencio puede cambiar por completo la experiencia que estamos teniendo con nuestro interlocutor. Cuántas veces estamos más preocupados de lo que vamos a decir que de entender o pararnos realmente a escuchar a la otra persona.
El silencio nos brinda esta oportunidad, el ego se disipa y entendemos el momento de conversar como una oportunidad para conocer mejor al otro. De ahí, que muchas veces si estamos manteniendo una acalorada discusión pocas respuestas son más efectivas que el silencio.
No es de extrañar que para muchos asesores y terapeutas no exista mejor herramienta que el silencio, y es que al emplearlo de la forma correcta es la mejor forma de ayudar a alguien. La mayoría de las ocasiones las personas solo quieren que alguien las escuche, ni siquiera precisan el feedback, muchas veces al exteriorizar lo que les ocurre empiezan a llegar ellos mismos a sus propias respuestas.
De ahí, que los grandes conversadores sepan usar el silencio, saben cuándo hablar en el momento oportuno y cuando callar y escuchar. Por difícil que parezca, empezar a tomar consciencia de nuestra forma de usar el silencio a la hora de conversar no solo puede enriquecer nuestras relaciones también, pasito a paso, puede ayudarnos a cambiar nuestra vida.
Como todo, empezar a sacarle partido al silencio al conversar requiere práctica, convertirse en buen oyente, si no es algo natural en ti se algo que debes aprender. Un buen conversador sabe cómo llevar la conversación, haciendo las preguntas pertinentes y evitando hablar, en la medida de lo posible, de sí mismo
Otra cosa que podemos hacer para empezar a incluir el silencio en nuestra vida es el de crear, en la medida de nuestras posibilidades, una casa silenciosa. Evitar encender la tele o la radio más a menudo o dedicar un espacio para meditar y estar en silencio.
Muchas personas eligen espacios en la terraza para crear su espacio de silencio, lo decoran y adaptan para disfrutar de no hacer nada y permanecer sin ruido. Hay quienes hasta instalan toldos para convertir ese espacio que no usan en un pequeño templo. Varios amigos han recurrido a los servicios de Toldos Clot para crear sus pequeños rincones de silencio.
De esta manera, podrás recargar tu mente al darle un tiempo de reposo y alejarla del ruido. Así nuestra mente tendrá la oportunidad de analizar los acontecimientos que han sucedido y que estructuremos mejor nuestros planes. El silencio también es el mejor amigo de las personas creativas y del nacimiento de las mejores ideas e invenciones.
Al final, es solo en el silencio en el que podemos visualizar y sentir la vida que queremos crear, es solo en esos espacio de vacío que todo se puede llenar si le damos la oportunidad.