Son muchos los problemas de salud a los que tenemos que hacer frente en nuestra vida en la mayoría de los casos. Quien más quien menos, tiene la necesidad de contar con profesionales especializados en un área concreta para resolver cualquier inquietud o dolencia y es evidente que, a medida que vamos teniendo una mayor edad, este tipo de asuntos puede ser más grave y tener una incidencia mayor en lo que tiene que ver con nuestra calidad de vida. Desde luego, es algo que entra dentro de la lógica de la sabia naturaleza. Una sabia naturaleza que rara vez suele equivocarse.
Pero hay cuestiones que, estando ligadas con nuestra salud, pueden suceder perfectamente entre gente de menor edad. Cuestiones para las que esa edad no importa y en las que lo que realmente cuenta no es otra cosa que el cuidado que hagamos de nuestro propio cuerpo. Es en este sentido donde podemos hablar de la salud bucodental, que en España es un problema cada día de mayor calado tanto entre personas adultas como en niños. Y es que el cuidado de nuestros dientes tiene una importancia muy grande en el tipo de vida que queremos tener.
El principal causante que muchos profesionales encuentran a este problema tiene que ver con la percepción de muchas personas, que suelen ver en el cuidado de la higiene bucodental algo que va separado de la salud. Este es un grave error. El cuidado de nuestra boca es algo que debe ser tenido muy en cuenta y en relación con la salud. Y es que ésta no está solo relacionada con problemas físicos, mentales, cáncer o algún otro. Los dientes tienen una influencia realmente importante en nuestra vida. Es una de las partes del cuerpo que más usamos a lo largo del día y ese es el motivo que nos tiene que llevar a tratar de cuidarlos de la mejor manera posible.
El portal web Statista ofrecía, en uno de sus análisis, la frecuencia con la que los españoles y las españolas hemos acudido al dentista entre 2014 y 2018. Según desvela este análisis, la verdad es que pocas cosas han cambiado. La frecuencia de acudir cada 3 y 6 meses sigue siendo la misma. Lo que sí ha variado es la frecuencia relativa a la visita cada año, que ha pasado de ser de un 48% a un 50%. Se trata de un aumento que no es el que nos gustaría pero que nos invita a ser optimistas de cara a los próximos años.
Hemos querido hablar con profesionales del sector dental acerca de las frecuencias de visita de los españoles al dentista. Para ello, contactamos hace unos días con la principal responsable de la Clínica Dental Patricia Aneiros, que nos comentó que existe una mayor predisposición de la gente a acudir al dentista una vez que ha pasado la crisis económica. Sin embargo, apunta, existe todavía un gran margen de mejora en este campo puesto que España continúa poseyendo uno de los índices más pobres en salud bucodental de toda Europa.
Demasiados profesionales para tan poca demanda
Lo que ocurre en España con el sector dental es, cuanto menos, curioso. Curioso porque, siendo uno de los países con una tasa más alta de problemas bucodentales entre la población, disponemos de una cantidad realmente grande de odontólogos. Según una noticia que fue publicada en la página web del diario 20 Minutos, hay un exceso de profesionales en este sector. Ese es el motivo por el cual hay una gran cantidad de ellos y ellas que se tienen que marchar de España y buscarse la vida en otro país.
Ese tipo de profesionales que se han marchado a ejercer la odontología fuera de España suelen comentar que los hábitos de higiene y cuidado de la boca en otros países suele ser más correcto y más habitual que en nuestra patria. Es algo que tenemos que corregir en España. Tenemos la mala costumbre de acudir al dentista solo cuando tenemos algún problema y no para tratar de prevenir ese problema. Es un asunto de cultura. Por eso es tan importante la labor de concienciación que han de hacer los dentistas en España, especialmente con los menores. Para cambiar los hábitos, ellos y ellas son realmente importantes.
En los próximos años, veremos si somos realmente capaces de cambiar esos hábitos que son tan perjudiciales para nosotros y nosotras y que tanto daño están haciendo a la sociedad española en los tiempos que corren. Desde las instituciones públicas (el ministerio de Sanidad y los colegios especialmente), se tiene que hacer conciencia y promulgar el cuidado de una salud bucal que tiene la misma importancia que la salud física o psíquica de una persona. Sin dientes, nuestra vida sería mucho peor. Solo hace falta imaginársela.