Cuando hablamos de dentista, a todos se nos vienen las mismas cosas a la cabeza: endodoncia, periodoncia, extracción… pero realmente poco o nada sabemos de otro tipo de prácticas habituales que, día a día, se realizan en su consulta.
De hecho, el mundo de la salud bucodental está muy poco explorado por la sociedad debido al miedo a que este tipo de médicos originan en nosotros. Y por eso, cuando vamos a la consulta y nos dicen que tienen que hacernos una pulpotomía, nos quedamos desconcertados (y, todo sea dicho, acojonados) por una palabra tan nueva que no sabemos qué narices significa.
Hoy, te lo explicamos todo sobre esta práctica tan extendida.
¿Qué es la pulpotomía, a quién se realiza y por qué?
Los nombres nuevos y complejos suelen causarnos impresión, sobre todo cuando no sabemos nada del tema. Pero, a veces, esos nombres extraños son la solución idónea para no perder una pieza dental y conservar nuestra salud bucodental por más tiempo.
La pulpotomía es un procedimiento dental en el que se va a proceder a la extracción del nervio de un diente. Posteriormente, se aplicará un medicamento en el área para prevenir la infección parcial y la disfunción de dicha pieza dental. Este procedimiento se realiza generalmente en dientes de leche (dientes temporales) en niños, para preservar la pieza por más tiempo y no tener que sacarla sin un motivo de mayor peso.
El problema real es que las cifras de niños que sufren caries en piezas de leche es cada vez mucho mayor, y tenemos que adelantarnos a las posibles consecuencias que estas pueden traer consigo.
Razones por las que tenemos que preservar los dientes de leche hasta que llegue el momento
Aunque los dientes de leche son totalmente temporales, cumplen una serie de estas funciones importantes… y su pérdida prematura puede tener consecuencias negativas en el desarrollo y la salud bucal de los niños, aunque no todos lo sepan.
Aquí hay algunas razones por las que es importante preservar los dientes de leche:
- Función masticatoria. Los dientes existen por una razón: masticar alimentos. En los niños no son diferentes, por lo que, de igual forma, los dientes de leche permiten a los niños masticar los alimentos correctamente y obtener los nutrientes necesarios para su crecimiento y desarrollo. Si los dientes de leche se pierden prematuramente, puede dificultar la masticación de los alimentos y provocar problemas nutricionales. Estos están elaborados para que duren una serie de años en su boca y, si se pierde con anterioridad, no van a salir antes: se va a quedar el hueco hasta que llegue el momento.
- Mantenimiento del espacio. Los dientes, además, también tienen un espacio predeterminado en la boca… y, si hay un hueco entre ellos, pueden desplazarse. Por lo tanto, los dientes de leche son importantes para mantener dicho espacio para los dientes permanentes que vendrán después. Si un diente de leche se pierde antes de tiempo, los dientes que tiene a su lado pueden moverse hacia el espacio vacío y dificultar la erupción de los dientes permanentes, ¡lo cual duele mucho!
- Dificulta el habla. Los dientes también se usan para el habla. Si te das cuenta, algunas letras las pronunciamos cuando la lengua entra en contacto de tal o cual forma con los dientes. Por esta razón, los dientes de leche son importantes para la pronunciación correcta de ciertos sonidos y para el desarrollo del habla. SI los perdemos antes de tiempo, podemos dificultar el desarrollo del habla en el infante.
- Altera la autoestima. No es ningún secreto que la visión que tenemos sobre nosotros mismos es importantísima. Pero has de saber que no solo es importante para el adolescente o el adulto, el niño pequeño empieza a desarrollar su autoestima desde muy temprana edad… y, si se mira al espejo y se ve mellado, puede influir en su autoestima. La pérdida prematura de los dientes de leche puede afectar la autoestima y la confianza de los niños, especialmente si los hace sentir diferentes a sus compañeros.
- Prevención de infecciones. Si los dientes de leche se infectan o se llenan de caries, la infección puede propagarse a los dientes permanentes que están debajo. Esto puede provocar problemas de salud bucal a largo plazo, porque estarían sin salir e infectados, lo que podría derivar, incluso, en infección de los huesos de la mandíbula.
En resumen, la hicieron de los dientes de leche es importante para el desarrollo y la salud bucal de los niños. Es importante tratar las caries y las infecciones de los dientes de leche de manera oportuna y mantener una buena higiene bucal para prevenir problemas futuros.
¿Cuándo debe realizarse una pulpotomía en un niño?
Que exista este procedimiento dental no quiere decir que deba realizarse en todos los casos en los que a un niño le duela una muela. Antes de nada, déjame aconsejarte algo: si a tu niño le duele una muela, antes de emitir tu propio informe, llévalo al dentista y permite que este evalúe el mejor procedimiento a seguir.
Desde Clínica Dental – Sánchez Arranz han querido aportar su granito de arena explicándonos cuáles son las principales causas por las que debe realizarse este procedimiento:
- Dolor dental. Si un niño se queja de dolor de dientes o encías, es importante llevarlo a un dentista para realizar una correcta evaluación del origen. Si se localiza una caries profunda que ha llegado al nervio, se puede recomendar una pulpotomía para evitar la propagación de la infección y el dolor. De esta forma, se evita el problema y se mantiene la pieza dental intacta.
- Diente roto o lesionado. Si un diente de leche se rompe o se lesiona debido a un accidente, puede exponer el nervio del diente y provocar dolor e infección. En algunos casos, una pulpotomía puede ser necesaria para salvar el diente.
- Caries dentales profundas. Las caries dentales muy profundas pueden causar daño al nervio del diente y a todo lo que lo rodea. Si la caries no se trata de manera oportuna, puede infectar el nervio y provocar dolor e inflamación. Podría, incluso, expandirse a los dientes vecinos En estos casos, una pulpotomía puede ser necesaria para salvar tanto el diente afectado como los dientes que tiene alrededor.
- Infecciones recurrentes. Si el infante tiene un diente de leche que se infecta con bastante regularidad, puede ser necesario realizar una pulpotomía para evitar la propagación de la infección y prevenir la pérdida del diente.
Existen métodos para evitar las caries, incluso en los niños más pequeños
La educación en salud bucodental es muy importante para asegurar la salud y el bienestar de los niños. De hecho, es casi lo más importante para mantener la salud bucodental en el tiempo.
Aquí hay algunos consejos sobre cómo educar a un niño en salud bucodental:
- Enséñale a su hijo a cepillarse los dientes. Cuando antes, aunque te parezca muy pequeño, enseña a tu hijo a cepillarse los dientes al menos dos veces al día (lo ideal es tras cada comida, para que se vaya acostumbrando). Asegúrate de que tu hijo se cepilla correctamente y durante, al menos, dos minutos.
- Usa hilo dental. El hilo dental es una parte importante del cuidado bucal y ayuda a eliminar los residuos de alimentos y la placa entre los dientes, que suelen ser los principales culpables de las caries en niños y adultos. Enséñale a tu hijo a usar hilo dental de manera adecuada para no hacerse daño y preservar el diente en el futuro.
- Acostúmbrales a visitar al dentista regularmente. Loo correcto es realizar, al menos, una visita al dentista al año. De esta forma, gracias a limpiezas y a revisiones, podrá detectar cualquier problema dental a tiempo y evitar que este empeore.
- Habla sobre los alimentos perjudiciales para los dientes. Aunque a todos nos encantan los dulces y las chuches, no hay nada más perjudicial para la salud dental que el azúcar. Por supuesto, no es lo único: el café y el tabaco también son factores clave en la pérdida del diente. Por lo tanto, ayuda a tu hijo a comprender que debe evitar alimentos y bebidas azucarados con frecuencia.
- Sé un buen modelo a seguir. Siempre se ha dicho que los niños son como esponjas: absorben todo lo que ven a su alrededor. Los niños aprenden mucho al observar a sus padres, así que asegúrese de ser un buen modelo a seguir para ellos. Cepíllate los dientes junto a tus hijos y muéstrale cómo cuidar adecuadamente sus dientes.
- Hable sobre los hábitos bucales saludables. No le hables solo de lo que NO debe comer… háblale, además, sobre la importancia de tener hábitos bucales saludables: no morderse las uñas o no morder la punta de los lápices, evitar chuparse el dedo, no usar los dientes para abrir cosas… porque son cosas que dañan las piezas dentales.
- Celebre los logros. Esto ayudará a motivarlos a seguir cuidando de su salud bucal. Porque, si tiene una felicitación cuando hace algo bien, tendrá ganas de volver a hacerlo de nuevo para conseguir de nuevo tu reconocimiento.
Recuerda que la educación en salud bucodental es un proceso continuo y requiere tiempo y paciencia. Con el tiempo, tu hijo aprenderá a cuidar adecuadamente de sus dientes y tendrá una sonrisa saludable y hermosa.
