La adicción al trabajo provoca problemas de salud física y mental. La Organización Mundial de la Salud (OMS) informa que trabajar 55 horas semanales aumenta el riesgo de padecer accidentes cardiovasculares hasta un 35%.
Un equipo de investigadores de la Universidad Nacional de Investigación de Rusia han descubierto que las mujeres que analizaron, tenían casi el doble de riesgo de adicción al trabajo que los hombres.
Los adictos al trabajo suelen trabajar entre doce o catorce horas diarias, esta adicción se conoce como un trastorno del comportamiento. Las razones son: problemas económicos, matrimonio deficiente o presión por parte de su organización o supervisor.
Los autores del estudio han demostrado que hasta qué punto el riesgo de adicción al trabajo está asociado con la percepción del trabajo y la salud mental en cuatro categorías laborales sugeridas por el modelo de Karasek o el modelo Job Demand-Control-Support (JDCS): pasivo, de baja tensión, activo y de tensión laboral.
Los trabajos «pasivos» pueden ser satisfactorios siempre que los empleados alcancen la meta establecida. Los trabajos de «baja tensión» tienen bajas demandas de trabajo y un alto control del trabajo, por lo que los trabajadores no corren un riesgo especial de sufrir problemas de salud mental.
Los trabajadores «activos» tienen altas exigencias laborales y un alto control del trabajo. Están capacitados para resolver problemas, como jefes o directores de empresas. Los empleados con riesgo de sufrir estrés son los que pertenecen al grupo de «tensión laboral», es decir, alta demanda y bajo control.
Los investigadores descubrieron que la prevalencia del riesgo de adicción al trabajo es más alta para los trabajadores activos y de alta tensión. Las personas adictas al trabajo tienen el doble de riesgo de desarrollar depresión, trastornos del sueño, estrés y otros problemas de salud.
Muchas personas no son conscientes de su adicción al trabajo. «Si usted no es capaz de desconectarse del móvil, del iPad, donde lo tiene todo, correo electrónico, redes sociales, Facebook…., puede no ser consciente de su adicción al trabajo », dice Carlos Alcover, profesor de Psicología del Trabajo y Organizaciones de la Universidad Rey Juan Carlos.
La Organización Internacional del Trabajo (OIT) informa que el 8% de los españoles dedica más de 12 horas diarias al trabajo. Este trastorno forma parte de las llamadas adicciones psicológicas sin sustancia, al igual que las relacionadas con el sexo, las compras o el ejercicio físico.
No es fácil de detectar esta adicción porque a veces se manifiesta con un estrés prolongado y con el uso de estimulantes. Muchas personas que padecen esta patología pueden llegar a utilizar medicamentos no legales.
Para algunas personas esta adicción puede ser una manera de huida del hogar, para evitar ocuparse de la casa y otras responsabilidades. También la falta de recursos económicos para hacer otras actividades, porque si no tienen dinero para salir se van a la oficina.
Las nuevas tecnologías favorecen el desarrollo de este trastorno, porque el uso del móvil o tablet hace que muchas personas no puedan desengancharse del trabajo en ningún momento.
Los profesionales de PROBIEN SALUD explican cuáles son los síntomas de la adicción al trabajo:
-Aunque sea consciente de su adicción, no le preocupa, porque cree que es una adicción constructiva.
-Se cree imprescindible, ya que es incapaz de delegar en los demás.
– No soporta la sensación de perder el control de las situaciones.
-Se lleva el trabajo a casa cada día y los fines de semana.
-Cuando llega su hora de relajarse no lo consigue y se siente frustrado.
-Es incapaz de disfrutar de sus vacaciones y de sus ratos libres.
-Mantener conversaciones con amigos sobre problemas del ámbito laboral.
-Revisar los emails recibidos en el móvil del trabajo antes de acostarte.
-Intenta trabajar y comer a la vez.
-Vida social muy limitada.
Si una persona no sabe desconectar del trabajo, aparecerá el insomnio, el estrés, enfermedades mentales de extrema gravedad, cefaleas, dolores musculares y de articulaciones, mareos, vértigos, náuseas…
Para evitar ser un adicto al trabajo o un workaholic debes cumplir tu horario de trabajo. Si alguna tarea ha quedado pendiente déjala para la próxima jornada laboral, también es importante apagar los dispositivos móviles para no estar siempre disponible .
Intenta desconectar y evitar hablar de trabajo en tu tiempo libre. También es recomendable que las personas que son adictas al trabajo pidan ayuda a un profesional experto en salud mental.
«Las adicciones pueden derivar en problemas graves para la salud física y mental del paciente. Es importante detectarlas en un estado precoz para conseguir un diagnóstico y tratamiento efectivo. Por este motivo, es muy importante la colaboración de amigos y familiares, tanto en la detección, como en el tratamiento y seguimiento», informan los profesionales de Top Doctors.
En las sesiones de psicoterapia se utilizan varios métodos para que el paciente desarrolle unos hábitos más sanos en su manera de relacionarse con el trabajo.